A continuación veréis dos de las varias opciones que tenéis para cocinar uno de nuestros productos más demandados!!
La Berenjena Violeta o Asiática, la cual es más larga y delgada que el resto de variedades (como podréis ver en las imágenes), tiene un sabor dulce y suave que combina muy bien con los fuertes sabores de la cocina asiática.
Su piel se caracteriza por ser extremadamente fina, de un color violeta muy intenso y es altamente rica en antioxidantes, por lo que su consumo es muy recomendable. Además su contenido calórico es casi inexistente, de ahí que su uso en dietas este tan extendido. Su consumo también ayuda a reducir el colesterol, a prevenir la artero-esclerosis y tiene un efecto reductor de la glicemia por lo que las personas con diabetes deben de tenerla presente en su día a día.
Las dos opciones de cocinar la Berenjena Violeta que os quiero mostrar tienen un nivel de dificultad muy bajo así siguiendo las indicaciones no tendréis ningún problema a la hora de llevarlas a cabo.
La 1º es Asar y Saltear.
– Lávala bien en agua fría y sécala completamente.
-Rebana el tallo y corta la Berenjena en rodajas de 1/4 de pulgada, ligeramente en dirección diagonal.
-Pre-calienta tu horno a temperatura entre media y alta.
-Cubre las rodajas con aceite de sésamo y ásalas en la parrilla durante 2 minutos por cada lado hasta que veas que aparecen las típicas marcas.
-Bate los ingredientes para una salsa de salteado, esto es un poco a gusto de cada consumidor, pero yo os voy a dar ciertos ingredientes que utilizo para la realización de este plato como son salsa de soja, vino de arroz, vinagre de vino de arroz, azúcar y almidón de maíz, todo eso en un tazón pequeño.
-Calienta el aceite de sésamo en un wok ( sartén de salteado) grande a una temperatura alta. Aquí en este paso añadimos un poco de ajo, chili, cebolla y el jengibre y saltéalos por alrededor de 30 segundos o hasta que desprendan su fragancia.
-Añade la Berenjena asada y saltéala por 1 minuto. Añade la salsa anteriormente realizada y llévala hasta el punto de hervor, permitiendo que la misma se espese ligeramente (un poco a gusto también).
-El último paso es servirla en plato y presentarla de una forma bonita 🙂
-La 2º es Asar y Saltear:
-El primer paso es precalentar tu horno a una potencia de 220º aproximadamente.
-Quita los tallos de las Berenjenas y corta cada una a lo largo.
-Coloca las Berenjenas con el lado del corte hacia arriba sobre una hoja para hornear cubierta en papel de aluminio. Cubre las Berenjenas con aceite de oliva y condiméntalas con sal, pimienta y una mezcla de especias como «hierbas provenzales», por ejemplo.
-Asa las Berenjenas por un tiempo de entre 7 y 10 minutos, comprobando frecuentemente su estado para asegurarte de que no se pongan demasiado marrones. Las Berenjenas están cuando están completamente tiernas (puedes verificarlo introduciendo un cuchillo en ella) y tienen un color marrón dorado. Por último, transfierelas al plato y a disfrutarlas 😉